El ejercicio aporta la alegría del movimiento, la sensación de felicidad, el sabor de la victoria y, por supuesto, la salud. Al menos, eso es lo que piensa la gente. En realidad, ir al gimnasio para perfeccionar la salud y el físico suele acabar con lesiones, visitas al médico y preguntarse por qué ha ocurrido. MedAboutMe analiza 5 reglas básicas que deben seguirse al hacer ejercicio.
Regla 1. Calentamiento: el primer paso obligatorio
Los novatos a menudo no prestan la debida atención al calentamiento, pues consideran que los ejercicios tradicionales repetitivos carecen de interés y tratan de ahorrar tiempo en ellos. Pero un calentamiento de mala calidad aumenta el riesgo de lesiones.
El sistema musculoesquelético es bastante inerte. Es fácil lesionarse los músculos, las articulaciones y los ligamentos si se pasa repentinamente de descansar a realizar cualquier tipo de actividad física. El calentamiento ayuda a preparar el cuerpo para una mayor carga de trabajo. Los músculos y los ligamentos deben estar bien calentados, lo que aumenta la elasticidad de los tejidos conectivos.
El calentamiento acelera los procesos físicos y químicos del tejido muscular, mejora la circulación sanguínea, aumenta la temperatura corporal, incrementa la excitabilidad del tejido muscular y nervioso, y aumenta la velocidad de transmisión de los impulsos nerviosos.
Un buen calentamiento también es importante desde el punto de vista psicológico. Te pone de humor para la actividad física.
Regla número 2. La comprobación del equipo y del material es la segunda etapa obligatoria
En este caso, por equipamiento entendemos todos los objetos que el deportista utiliza en su entrenamiento. Puede ser:
Área de ejercicio
Si se trata de una pista de footing, comprueba que es adecuada para las velocidades previstas. Si se trata de un gimnasio, para evaluar si el terreno es adecuado para su entrenamiento.
Equipos de fitness
Si se utilizan barras, es conveniente comprobar que la barra está bien sujeta para que no se suelte durante el entrenamiento. Si tiene previsto correr en una cinta de correr, recuerde utilizar la llave de seguridad. Cada máquina requiere ciertas precauciones de seguridad. Si no conoces los riesgos, habla con un instructor y que te los explique.
Equipo especial
El ciclismo, el monopatín, etc., requieren el uso de equipos de protección, al igual que muchas artes marciales, deportes de juego, etc.
Regla nº 3. Ejercicio – según sus posibilidades
Los atletas novatos tienen más probabilidades de lesionarse que los experimentados. Hay que tener en cuenta que los motivos de las lesiones varían según la experiencia. Los principiantes suelen ser incapaces de adaptar sus propias capacidades a la carga de trabajo requerida. Todavía no tienen suficiente fuerza, coordinación, técnica, experiencia. Sus cuerpos aún no saben cómo reaccionar adecuadamente a las nuevas condiciones de entrenamiento, a los nuevos movimientos y a las propias necesidades del principiante.
Por eso es tan importante escuchar al propio cuerpo y seguir estrictamente las recomendaciones de los entrenadores, instructores y otros especialistas, por ejemplo, los médicos que pueden aconsejar que no se sobrecarguen las articulaciones, el corazón y otros órganos del cuerpo.
Y por eso es tan importante aprender a controlar su estado en una serie de parámetros: como mínimo, debe ser capaz de contar su ritmo cardíaco, controlar la aparición de dolor e inflamación y, por supuesto, evaluar con sobriedad los límites de sus capacidades.
Regla número 4. De lo simple a lo complejo: afina tu técnica
En todas las disciplinas deportivas existe el concepto de «técnica». Correr en el bosque o en una cinta de correr, las artes marciales, el entrenamiento con pesos libres o en máquinas, la natación o el crossfit: la técnica, es decir, la ejecución correcta de los ejercicios, es necesaria en todas partes. En primer lugar, una técnica correcta garantiza que, al utilizarla, el deportista desarrolle exactamente los músculos y las habilidades que necesita. En segundo lugar, una técnica correcta es una garantía de seguridad para el ejecutante. Lo contrario también es cierto: la ejecución incorrecta de un ejercicio es un camino seguro hacia la lesión.
Por eso, al empezar a practicar cualquier deporte, hay que prestar especial atención al dominio de la técnica de los ejercicios de entrenamiento. En los gimnasios esto es supervisado por los instructores, en un gimnasio también tiene sentido pedir a un instructor que les ayude a mejorar su técnica y sólo entonces seguir entrenando por su cuenta.
Regla número 5. Sólo especialistas para el asesoramiento
Cada persona es única, todos los que acuden al gimnasio tienen su propia historia de éxitos y fracasos deportivos, lesiones, enfermedades, consecuencias de un estilo de vida poco saludable. Y las descripciones generales de unos u otros ejercicios destinados al público en general no siempre son adecuadas para cada persona.
A menudo, los intentos de aprender elementos acrobáticos, los entrenadores o el trabajo con pesos libres por uno mismo conducen a lesiones. En las etapas iniciales, una lesión no sólo es un golpe para la salud de una persona, sino también un poderoso factor de desmotivación.